El drama más épico de los últimos tiempos vuelve a la pantalla chica con su sexta temporada y con ella el invierno se avecina junto al paso de los White Walkers que no pasarán ni solos ni desapercibidos.
Game of Thrones sigue las múltiples líneas argumentales de la saga literaria de George R. R. Martin, Canción de Hielo y Fuego. Mientras la mayor parte de la historia se sucede en Poniente, un continente en que las estaciones no tienen tiempo determinado y la duración se puede extender por años, la historia se centra en las violentas luchas dinásticas entre familias nobiliarias por el control del Trono de Hierro que hicieron que desde la primera temporada sus espectadores no se encariñen con los personajes que mueren cuando menos se lo espera.
Por primera vez la entrega de la temporada no corresponde con libro, es así que tanto lectores como espectadores están a la deriva y expectantes con lo que la sexta temporada pueda traer.
Desde el 15 de junio de 2015 es que los fanáticos de las fantasías medievales esperan por esta entrega que llegará a la TV el 24 de abril y que esperan que uno de los personajes principales vuelva de entre los muertos y sea la temporada triunfal. Eso sí, con batallas épicas y sangrientas, y más muertes.
Mientras GoT se convirtió en el programa más exitoso en la historia de la cadena, continúa rompiendo records de audiencia y el año pasado logró alzarse con el Emmy a Mejor Serie Dramática.
