Daniel Osvaldo, tenía su vida armada en Europa jugando al fútbol, con su esposa argentina Jimena Barón y su hijo Morrison. Decidió volverse a Argentina y probar jugar en el Club Atlético Boca Juniors…
Hizo dos temporadas en Boca, se separó de su mujer y tuvo varios amores fugaces. Decidió volverse a Europa, dejar el fútbol y dedicarse a la música.
En Barcelona debutó como cantante, en el barrio Gótico y también se lo vio a los besos con una rubia…